…ocho años que se pasaron casi sin verlos. Ocho años contigo, juntos.

Aún recuerdo el día que abrimos la primera oficina de pmc, un siete de noviembre 2012. Mi amigo Frano Capeta nos había hecho llegar un arreglo de flores muy bonito, el cual pusimos en la recepción para darle color al asunto. Recuerdo que me llamó mucho la atención porque 1. Nunca me habían regalado flores, y 2. Porque nadie más llevo nada de nada, jajaja.

Yo no tenía intención de abrir oficina alguna, dado que tal y como habíamos organizado el esquema de funcionamiento, no hacía falta; sin embargo, mi bien querido amigo Ricardo Santiago (por aquel entonces, director regional de EXIN para España, Portugal y Latinoamérica), con quien estuve unos días antes dando una conferencia en Santiago (Chile) y quien venía a Lima específicamente para otra conferencia conmigo, me dijo “ya que estaré en Lima, por qué no aprovechamos de ver la oficina y nos reunimos con algunas personas”. Hasta ahí no había nada de malo salvo por un detalle: No teníamos oficina.

Lo cierto es que llevaba ya algunos meses moviendo la bandera pmc en Lima, y habíamos pegado con mucha gracia en el mercado. Yo llegué en marzo solo por 15 días, tras haberme ido en enero, y me quedé 2 meses. Luego me volví a casa para volver en menos de un mes, y desde ese momento ya no pude irme más, e hice de Lima mi “base de operaciones”. Desde ese día vuelvo a España cada 2 o 3 meses, pero la mayor parte del tiempo estoy en Lima (o dando vueltas por la región). Siempre lo he dicho en público “la culpa de todo esto fue del amigo Frano” quien, siendo de los pocos que respondió a un correo que envié a varios empresarios del sector, confió en mí y me trajo en noviembre 2011 para formar en ISO20000 a uno de sus clientes del sector público. Luego dimos una charla en el teatro “la plaza” de Larcomar por cortesía de ISIL a través de Sergio Matsukawa, y tras reventar el aforo a causa del interés que se despertó, todo lo que vino después fue inevitable. Volví a casa en enero, para volver a Lima nuevamente a principios de marzo donde tenía que dar algunos cursos para SISE, en este caso el otro culpable fue el amigo Miguel Holguín, quien confiando en mí y brindándome todas las facilidades que tenía en sus manos, convocó a los primeros grupos de ITIL e ISO20000 que tuve la suerte de brindar para una gran cantidad de profesionales. En esos grupos tuve el placer de conocer a mucha gente buena, algunos que hasta hoy siguen siendo amigos, alumnos y colegas; otros que ya ni veo pero que de seguro nos ven todo el tiempo.

Recuerdo que estuve durante algunos meses muy metido con la extinta SINUX, también con SYNAPSIS, y varias otras organizaciones que decidieron confiar en nosotros y en nuestra manera de hacer las cosas. Yo, aunque estaba realmente agotado por el nivel de trabajo que se me exigía, me sentía inmensamente agradecido y emocionado. Así pues, pasó el tiempo, y llegó el día en que Ricardo me dijo “lo de la oficina”, y como locos nos echamos a buscar donde poner la bandera. Abrimos la primera oficina un miércoles 7 de noviembre del 2012. 50m2, un tercero sin ascensor, en una callecita de Miraflores llamada “José G. Chariarse”. Por aquel entonces era un verdadero hombre orquesta, pero eso no fue límite para conseguir que la oficina estuviera montada en menos de 2 semanas (siempre he logrado hacer cosas muy velozmente, jeje). Ya me podías ver armando la gráfica para las publicaciones, preparando las clases y atendiendo todo lo que yo podía (y más). Fue una verdadera vorágine. Una locura.

Hasta ese momento vivíamos medianamente tranquilos, porque salvo nuestros clientes que iban creciendo y creciendo cada vez más, casi nadie sabía que estábamos ahí. Yo armé toda una estrategia para el uso de redes sociales, y me lancé con todo a mover la marca y los servicios por ahí. No es por jactarme de nada, pero en nuestro sector a nadie se le había ocurrido que ese canal era algo digno de explotarse, y bueno, lo explotamos. Si bien yo seguía muy calmado en ese sentido, el trabajo nos iba sobrepasando cada día más. Un día, a principios de diciembre 2012 llegaron las primeras estadísticas de EXIN respecto a nuestra participación en el mercado. Yo simplemente no lo podía creer, pero grande fue mi sorpresa cuando Ricardo me comentó que éramos el número uno en ventas y diversificación de portafolio en el país, y uno de los partners más relevantes de Latinoamérica. Nuestro movimiento, en casi un año completo, empezaba a dar frutos. Me resultó muy curioso porque no había pasado mucho tiempo desde la reunión que tuvimos Ricardo y yo en Madrid, donde le decía “voy a volar a Perú y voy hacer esto y aquello, y voy a vender al menos unos 20 exámenes al mes”, y mi querido amigo me contestaba con un “claro, tu inténtalo y listo” (se mostró muy escéptico, jajajaja. Aún hoy se lo recuerdo). Me imagino que su rostro tiene que haber sido un poema cuando no vendí 20 exámenes al mes en un año, sino que superamos esa ínfima cifra por muchísimo más, y con el paso de los años logramos números realmente históricos para Latinoamérica y mucho más. ¿Sabías que durante muchos años no hubo ningún otro centro que tuviera mayor volumen de negocio que pmc en todo Latinoamérica y España? …pusimos al país y a la región en el centro del universo de las casas certificadoras, y esto generó un efecto enorme que en alguna publicación del itSMF Internacional, mi amigo Alejandro Debenedet denominó “la fiebre latina” (Latin Fever). Qué bonito, ¿no?

Llegó el 2013 y abrimos el área de consultoríaSe incorporó mi amigo Héctor Duncan y empezamos a crecer vertiginosamente. Nos mudamos, seguimos creciendo y nos volvimos a mudar, y todo ha sido desde aquellos años una verdadera aventura. Una aventura que muchos quisieran poder contar como propia, pero que solo ocurrió una vez y ocurrió con nosotros. En el camino que nos acompaña hemos pasado por muchas cosas. Pusimos de moda la ISO20000 en todo el sector, y logramos la certificación para las primeras empresas en el país. Luego, pintamos nuevas reglas en el mercado cuando empezamos a hablar de “la nueva trinorma” conformada por las ISO20000, ISO27001 y la ISO22301. Integración de sistemas de gestión orientados a TI, sí, nosotros fuimos. Lo hicimos primero y lo trajimos al mercado como una gran opción de ahorro de tiempo, dinero y gestión. Certificamos al primer ministerio (MIDIS) de la región en ISO27001, así mismo como lo lees: El primerísimo. Más adelante logramos la ISO20000 para una de las mesas de servicio más potentes y maduras que tiene todo el estado peruano, y donde se realizó la mayor implementación de procesos ITIL de toda la región (también nosotros). Hemos trabajado para más de 80 de las 100 mejores empresas del país, a través de los diferentes servicios que brindamos y podemos decir que cambiamos la mentalidad del mercado respecto a la lógica de gestionar servicios. La mayor cantidad de proyectos ITIL que ha habido en el país es trabajo nuestro, la mayor cantidad de implementaciones de ISO20000 e ISO22301, también. Trabajamos optimización de procesos usando LEAN, para una de las más grandes empresas de hidrocarburos del mundo, del mismo modo que apoyamos a diferentes organizaciones a lograr la mejora de sus procesos a través de diferentes marcos, estándares y buenas practicas.

¡Ah! y en nuestra área de entrenamiento, hasta la fecha se han formado más de 9 mil profesionales en todos estos años. Nuestra tasa de fidelización es enorme, al punto que de cada 10 alumnos que llegan por primera vez a pmc, 4 regresan 3 veces más durante el mismo año, 3 lo hacen 6 veces más, 1 tan solo un par más, y 2 lo hacen solo una vez (pero vuelven al año siguiente, jeje). ¿Suerte, casualidad, será el pancito del break, el agua? Yo lo llamo “servicio” y el estilo que tenemos todos en esta casa. Un estilo que está impregnado en todos nuestros entrenadores, quienes no solo son unos fuera de serie, sino que además son personas enormes y súper comprometidas con pmc. Esto nos ha permitido abrir varias ramas de formación oficial, donde cada una es liderada por un verdadero especialista en el tema. Luis ve Continuidad, Riesgos y Emergencias. Jorge ve Seguridad, Ciberseguridad, GDPR y Anti soborno. Cesar ve Gestión de Proyectos, Cloud y Service Desk. Juan ve Outsourcing y Gestión de Proyectos. Henry ve Scrum, DevOps y DevSecOps. Hector ve Gestión de Proyectos, Gobierno Corporativo, Gestión de Servicios y Lean; y bueno, yo sigo humildemente haciéndome cargo de toda la rama ITIL y COBIT, a la par que manejo la linea de Transformación Digital. Cada clase es un evento para todos, y si conocieras al detalle toda la maquinaria que está detrás para que las clases sean como son, te sorprenderías gratamente. Es un trabajo que todos hacemos sincronizados como un reloj, y donde TODA la organización se vuelca para reaccionar y solucionar todo con prontitud. Lo más bonito del área de entrenamiento, es que tus profesores llegan a la clase justo después de haber estado todo el día trabajando en mucho de lo que te van a contar durante la clase. Es una alegría ver cómo dominan sus temas, y ver cómo se convierte en más que una clase, en una sesión de experiencias y conceptos aterrizados. ¡Ah! ¿te conté que el primer curso de ITIL4 en castellano que se hizo en el mundo (con todo traducido), lo hicimos nosotros? O que tuve la suerte de ser invitado por AXELOS para el primer grupo oficial de ITIL4 Managing Professional (Londres, agosto 2019), y que me convertí sin quererlo en el primer ITIL4 Managing Professional de habla hispana en el mundo. Qué “suerte”, ¿no? …lo cierto es que nuestra área de entrenamiento oficial ha hecho más que historia, y ha generado estadísticas alucinantes sin ser, como ya te contaba, una organización multinacional con multitud de sedes por el continente.

Con todo eso, y mucho más, seguimos siendo exactamente los mismos que éramos al principio. No ha habido un ápice de cambio en nuestra manera de ver las cosas, ni en la forma que valoramos a la gente que nos valora realmente. Hemos tenido, como toda organización, momentos buenos, malos, malísimos y buenísimos. Es innegable que sí. Pero siempre hemos mantenido la esencia de lo que somos. En el camino tuvimos múltiples emprendimientos, diferentes negocios que no salieron bien, iniciativas que fracasaron estrepitosamente, inversiones que terminaron siendo una gran pérdida, etc., etc. Pero hemos seguido siempre con la misma cara, tratando con sus más y sus menos de hacer frente a todo. Cuando me dicen “oye, es asombroso todo lo que han hecho en tan poco tiempo”, siempre respondo diciendo que lo verdaderamente asombroso ha sido hacerlo sin tener inversionistas, padrinos, amiguetes, y sin nunca haber pedido favor a nadie. No tenemos de eso, y nunca hemos querido tenerlo. De ahí que tengamos políticas muy estrictas respecto a nuestros clientes. Nos invitan todo el tiempo a cotizar, pero solo trabajamos con organizaciones que nos inspiren confianza y con quienes se pueda trabajar del mismo modo, en confianza. La vida es muy corta como para amargártela en el trabajo, y como aprendí hace algunos años: lo importante es ser feliz.

Este 2020 ha sido una verdadera locura, pero cuando todo esto empezó solo pude pensar “bueno, es hora de ver de qué estamos hechos realmente”. Ha sido muy laborioso, sobre todo en la coordinación a distancia, pero si tuviera que rescatar algunos logros de este 2020, te diría que nunca detuvimos nuestra operación, ni por 15 días ni por 15 minutos. Nuestra operación se mantuvo continua en todo momento, y lo único que hizo pmc fue “darle al botón” de “Modo pandemia: ON”. Nunca nos detuvimos y hemos seguido atendiendo nuestros proyectos, y ganando algunos cuantos, sin ningún inconveniente. Actualmente trabajamos en la elaboración de un marco general de gobierno para una de las principales mineras del país, por otro lado, estamos implementado procesos ITIL para una de las empresas más relevantes de la industria pesquera, avanzamos en la implementación de un sistema de gestión ISO20000 para una empresa de servicios de telecomunicaciones, y trabajamos (como siempre) en diversas iniciativas confidenciales que garantizan nuestra disrupción en el mercado, y que nos permiten ser quienes hemos logrado ser.

Quizás uno de los logros más grandes que le concedo a la empresa para este año, ha sido que hemos logrado permanecer todos juntos y unidos. No hemos permitido que nadie se caiga del barco, y aunque hemos tenido que afrontar verdaderas tormentas, seguimos siendo los mismos que éramos antes que la pandemia empezara. Seguimos innovando, seguimos refrescando el portafolio, y seguimos 100% operativos en medio de una coyuntura donde muchos han sucumbido dramáticamente. Ahora diferentes países de la región nos abren los brazos y nos brindan la confianza necesaria, así pues, verás continuamente a compañeros de México, Colombia, Bolivia, Chile, Argentina, Panamá, Guatemala, Honduras, Ecuador, Nicaragua y más lugares, a través de #PMCLiveTraining. Puedes confiar en que seguiremos aquí por muchos años más, y todo esto es gracias a ti.

No ha sido un camino sencillo, no ha sido fácil ni tampoco han sido todo alegrías y festejos, pero es real, está bien pensado y si miras para atrás, verás que existe un antes y un después de nuestra aparición en el mercado, y ya tan solo eso es memorable y trascendente. No nacimos como una iniciativa fortuita o efímera, nacimos con una visión muy ambiciosa y singular, y el tener esas cosas claras nos ha permitido caminar el camino que, de manera muy resumida, te narro en estas líneas. Seguramente estés pensando en emprender o en hacer algo de manera independiente, pues hazlo, pero nunca olvides que todo es paso a paso, que nadie llega a “besar el santo” el primer día, y no te saltes etapas ni pretendas ser quien no eres (o quien aún no logras ser), no adoptes poses absurdas o ridículas pensando que así te respetarán más o te tomarán en serio (todo lo contrario, se reirán de ti). Si hay algo que te hace diferente, es ser tú mismo; y eso, ni con todo el oro del mundo se puede comprar. Sé quién en verdad eres, se congruente, y se fiel a tus objetivos y principios aun cuando no cuentes con el agrado o comprensión de todo el mundo. Como alguna vez me dijo mi recordado amigo y mentor, Antonio: «Juanma, la vida no es un sprint. La vida es una maratón», y aunque por aquel entonces no lo entendía, los años me hicieron darle la razón.

Muchas gracias por estos ocho años. Mil gracias. Qué digo mil ¡¡Millones de gracias!! A ti que nos eliges para formarte en nuevas disciplinas, a ti que nos contratas para mejorar tus procesos, a ti que nos llevas para engreír a tu cliente y darle mayor confianza en tus servicios, a ti que nos halagas todas las veces que intentas copiarnos, a ti que te inspiras en nosotros para buscar tu propio emprendimiento, a ti que nos valoras y aprecias de corazón tanto como lo hacemos nosotros, y a ti que siempre estuviste ahí con nosotros y que nos has visto volver realidad tantos y tantos sueños (tuyos y nuestros). A todos ustedes, gracias. En verdad, muchas gracias por todo y por tanto. Sigamos trabajando por ocho años más de aventuras tan bonitas y memorables. Gracias, gracias, gracias.

Un abrazo. JuanMa. (…y gracias, otra vez).

Facebook
Twitter
LinkedIn