La pandemia, el oxígeno y la falta de humanidad…

Me parece que, salvo que hayas vivido en una caverna durante los últimos 12 meses, todos tenemos claro que el virus realmente es capaz de matar a quien se contagia. No es sencillo hablar de esto que te cuento, pero he tenido la mala suerte de encontrarme con el bicho muy de cerca, por familiares y por amigos. Ya sabemos que el sistema de salud (público y privado) no es suficiente como para afrontar una “segunda ola” y sabemos tambien que, digan lo que digan muchos, ya estamos en medio de esta y nada puede evitarlo.

Qué está pasando y por qué esto está cobrando matices de desgracia. Pues mira, imagina que una familia recibe la noticia o ve como su padre, madre, abuelo, abuela, hermano o primo se ha contagiado de COVID19, y dentro de las primeras cosas que han detectado es que tiene menos de 90 de saturación (oxígeno en la sangre, donde lo normal es de 95 a 100). Es evidente que necesita oxígeno, entonces ¿pueden ir a un hospital? No. ¿Por qué? Porque no hay suficientes recursos para atender a la gente, ni existen camas de cuidados intensivos a tu disposición. Al margen de que casi todos los médicos del sistema público te dicen “si puedes evitarlo, no lo lleves al hospital porque es peor” (no me preguntes por qué, pero tambien me lo han dicho muchas personas). Entonces, en esta situación, la familia tendrá que ver de dónde consigue el bendito oxígeno.

Un balón de oxígeno de 10 m3, con tan solo 5 o 6 m3 de carga, puede costar entre 900 y 2,800 soles. Tal y como lo lees, entre 250 y 800 dólares, para que la carga te pueda durar como mucho un día. Luego tienes que recargarlo, claro. La recarga te puede costar de 15 a 45 soles el m3, con lo cual un tanque lleno de 10m3 (si es que lo consigues, porque ahora hasta eso se está racionando) puede costar de 150 a 450 soles, es decir de 40 a 130 dólares por cada tanque recargado, y muchas veces se necesitan unos 2 o 3 (o más al día) durante una cantidad de días indeterminada porque pueden pasar dos cosas: 1. Que mejore y se estabilice la saturación de la persona, o 2. Que empeore y tenga que ser intubado (para lo cual no hay donde llevarlo y de seguro morirá en su casa o en una fila a las afueras de un hospital). Claro, me faltó mencionar que esos lugares donde recargan oxígeno, en su mayoría, no trabajan los domingos (desalmados). Con lo cual tienes que lograr conseguir el oxígeno suficiente para soportar todo el fin de semana con tu familiar al borde de la asfixia o de un paro cardio respiratorio.

Estamos hablando de que una familia cualquiera necesitaría un promedio de 100 dólares al día, más un monto inicial de unos 500 dólares para adquirir el primer tanque de 10m3, durante al menos un par de semanas o mucho más, en un pais donde el salario mínimo no llega a 300 dólares mensuales y donde el empleo ha sido destruido durante el último año de manera colosal, y muchas más complicaciones. Pienso que, si todos fueran conscientes de lo que implica esta situación, más allá de la perdida física de un familiar, se tomarían las cosas con más seriedad y responsabilidad.

Ah, no olvidemos que al margen del costo económico y emocional, hay que considerar el tiempo y la logística que implica conseguir que alguien te recargue los tanques de oxígeno. Plantas de recarga, en su gran mayoría, privadas (no públicas). Familias enteras buscando desesperadamente donde recargar sus tanques de oxígeno, haciendo filas interminables de un día para el otro (durmiendo en la intemperie, o sin dormir esperando a ser uno de los afortunados que consigue recargar el tanque de oxígeno), angustiados por cómo conseguir el dinero para comprar un tanque, y luego por cómo recargarlo día tras día para dilatar lo que en muchas ocasiones será “inevitable” al no tener un hospital que los reciba. Es una verdadera tragedia, y no parece haber solución a corto plazo.

¿Cómo pueden vender la carga de oxigeno con tal variedad de precios? Pues es simple. Porque hay muchos que están “haciendo negocios” en ese sentido. Lo recargan por 15 soles y te lo venden por 45 soles (por cada m3). O compran los tanques por 500, y te los venden vacíos por 1000. Es una locura, una completa locura y falta de solidaridad y, por qué no decirlo, de humanidad.

Este fin de semana conseguimos comprar algunos tanques de oxígeno, ninguno lleno en su totalidad (porque no hay forma), tras una travesía de casi 50km entre idas y vueltas, y con un gasto que podríamos considerar prohibitivo para la gran mayoría. Lo triste es que sabemos que eso no solucionará nada, pero al menos dará “un respiro” a la situación tan caótica que se atraviesa, y que nos aqueja. ¡¡Que mierda todo esto!!

En pleno 2021, la gente muere por falta de oxígeno que no puede comprar, porque no tienen con qué, o no encuentran dónde, y todo a causa de un virus que está más vigente que nunca, lo quieran creer o no, está ahí y te puede matar. ¿Lo más complicado? Lo más complicado es que no te matará de manera fulminante, te hará sufrir y morirás como un pez fuera del agua con tu familia (o no) alrededor viendo como no pueden hacer nada por ayudarte, y sabiendo que en muchos casos han tenido que sacrificar todo lo que tenían solo por darte unos días más de vida. ¿Tienes familia? Cuídate.

Que tristeza. De corazón, que pena tan honda…

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